Montañas de montañas y otras cosas bonitas al filo de lo pisable

CARQUINYOLIS DE CHOCOLATE

.

Dulce introducción al caos...

El día 22 de este mes, además del sorteo de la lotería de Navidad, fue el cumple de mi hermana Elena. Le regalé un libro de recetas de postres de chocolate muy chulo. "365 rectas de chocolate" de Jennifer Donovan.

Echando un vistazo, encontré entre las muchas y muy interesantes recetas, una estupenda de sequillos que en Catalunya son conocidos por carquinyolis. Me pareció facilísima y muy buena y quise hacer una versión.

Curiosamente, en el blog de i-recetas, también había una versión muy parecida de la receta. Así que, entre una y otra…no tenía excusa, era el destino…que me lo ponía en bandeja, nunca mejor dicho, para poder disfrutar haciendo este postre.

En Septiembre de este año Extremoduro, uno de mis grupos preferidos desde que tenía 15 años, sacó disco nuevo, La ley innata.
Está concebido como una obra de música clásica, en 6 movimientos. El primero de ellos “Dulce introducción al caos”.

En la portada del disco aparece una frase en latín “Est enim ivdices haec non scripta sed nata lex qvam non didicimvs accepimvs legimvs vervm ex natvra ipsa arripivimus havsimvs expressimvs ad qvam non docti sed facti non institvti sed imbvti”.

Atribuida a Cicerón, cuya traducción libre sería algo así como “Existe, de hecho, jueces, una ley no escrita, sino innata, la cual no hemos aprendido, heredado, leído, sino que de la misma naturaleza la hemos agarrado, exprimido, apurado, ley para la que no hemos sido educados, sino hechos; y en la que no hemos sido instruidos, sino empapados.”

Y yo creo que vamos contra esa ley natural y la mayoría del tiempo no es por voluntad propia. La teoría del caos...Parece ciertamente, que todo a nuestro alrededor se reorganiza constantemente para desviarnos del camino que nos ha de llevar a encontrar el verdadero sentido de nuestra existencia.

Deberíamos encontrar la manera de poder hacer, la mayor parte de nuestro tiempo, todo aquello con lo que nos sentimos bien y hacemos sentir bien a los demás. Y tenerlo presente constantemente, dejando de lado situaciones, personas...todo lo que nos aparte de ese derecho, de esa "Ley innata" para la que cada uno de nosotros hemos sido hechos, empapados.

Se rompió la cadena que ataba el reloj a las horas,

se paró el aguacero ahora somos flotando dos gotas,

agarrado un momento a la cola del viento me siento mejor,

me olvidé de poner en el suelo los pies y me siento mejor.

Volar...volar!

Una racha de viento nos visitó,

y a nosotros ni el pelo se nos movió.

La canción de que el viento se parara,

donde nunca pasa nada.

Ya no quiero una piedra en pie,

porque que el viento la derribó…

Ya no queda nada de ayer,

porque el viento se lo llevó…

.

Ingredientes

- 125 gr. de harina. (5 cucharadas aprox.)
------------------------------------------------------------------
- 1/2 curadadita de levadura química.
------------------------------------------------------------------
- 1 pizca de sal.
--------------------------------------------------- ---------------
- 25 gr. Azúcar moreno. ( 1 cucharada colmada).
------------------------------------------------------------------
- Ralladura de limón o naranja.
------------------------------------------------------------------
- Huevo grande.
------------------------------------------------------------------
- 5 ml extracto de vainilla.
------------------------------------------------------------------
- 55 gr. Almendras enteras (mejor sin tostar).
------------------------------------------------------------------
- 50 gr. Chocolate negro 70% d cacao para trocear.
------------------------------------------------------------------
- Papel vegetal para hornear.
------------------------------------------------------------------
- Opcional: Fundir chocolate para el baño.
------------------------------------------------------------------

Elaboración

1- Precalentar el horno a 190º.
Mezclar la harina, con la levadura y la sal.
Por separado, mezclar el huevo bien batido con el azúcar, la ralladura de limón o naranja y el extracto de vainilla. También le quedaría bien extracto de azahar o licor de naranja.
Batir bien y mezclar con la harina. Añadir las almendras y el chocolate troceado.

Jennifer Donovan sugiere variaciones de la receta, con pistachos o nueces, e incluso añade cacao en polvo, para chocolatear la masa. El contraste de color del cacao, con los pistachos es muy bonito.

2-Sobre la bandeja del horno, cubierta de papel vegetal para hornear, verter la mezcla en diagonal a la bandeja, para hacer una forma lo más alargada posible, de unos 5 cm de ancho.
Después crecerá un poco. Para que quede un acabado mas liso de la superficie, yo dejé el papel pegado por arriba, como semi envolviendo el churro de masa, sin aprisionarla.

3-Hornear durante 20 minutos, o hasta que la masa esté firme al tacto. Ligeramente dorada.
Dejamos enfriar y cortamos en rodajas diagonales, de 1,5 ó 2 cm de grueso.

4- Colocar las rodajas en la bandeja con el papel de nuevo y hornear 15 ó 20 minutos más por cada lado, hasta que estén doradas.

Decorar con chocolate.

Nota: Jennifer Donovan no utiliza el extracto de vainilla, ni ningún otro licor. Así que, su uso es opcional.

Los próximos quiero hacerlos de avellanas y con licor de avellana...uuuummm.