Un par de semanas antes de coger las vacaciones, ya rondaba por mi cabeza subir al lago de Marboré.
Así que fui mirando la información necesaria para preparar la salida y nada más volver de London...zás...pallá que me preparo la mochila y me voy pal pueblo.
Le propuse la idea a David, que aceptó sin poner pegas...je,je,..la ignorancia hace más vulnerable al pueblo...
No le mentí, le leí la información literalmente de lo escrito en el libro de rutas -esta conocida ruta constituye una espectacular excursión...tititi tatata..-
Con estas, iniciamos la salida.
Llegamos a la zona de acampada de Pineta, la temperatura esa mañana era de 6º y hacia bastante aire. Con lo que la sensación de frio era importante.


Esta es la cascada del Cinca y baja del glaciar de Monte Perdido y del ibón de Marboré.

La "cascada" del Cinca.
A David se le cascan las rodillas y empieza a sospechar de la dureza del ascenso al ibón, ja,ja,ja...
Pero yo con mi sabuarfer, le convenzo de que seguro que la caminata es tan larga (5 horas) por que la senda debe dar mucho rodeo, para evitar el desnivel...jo,jo,...yo misma me sorprendo a veces de mis recursos lingüísticos... que dominio de la situación...




Vista del valle de Pineta desde la senda de subida al Balcón.

Yo también estoy cansada, pero ansiosa por llegar arriba. El aire es muy frio. Y aunque hace sol y está muy despejado, la temperatura no ha subido de los 8º.
Casi a mitad de la senda, trepando por la morrena, pienso que es mucho más duro de lo que esperaba. Se me está haciendo un poco largo. Mis abductores están ya fatal...jo,jo...en que estaría yo pensando...


La verdad es que la vista es impresionante, pero cuanto más lejos andamos, más sorprendente se hace el camino.

El color de las piedras es muy bonito, como el del Pico Blanco que se ve en la foto. El cielo estaba muy azul.
Y yo que pensaba que en las fotos que habia visto estaba retocado.


David está ya con todos los músculos engarabitados...jo,jo...esta me va a costar cara.
Por lo menos 2 Musakas y tres paellas de longaniza...por mencionar solo el tema alimentario...


Ya está, lo peor ya ha pasado...siempre que no pensemos en la bajada...


2500 m.




pero eso es harina de otro costal.
Continuamos por el caos de morrena, aún nos queda un ratito hasta el lago.
Lo de la pierna no es para hacerme la chula...jo,jo,jo...es que tengo los abductores pa tirarlos...

David celebra la llegada al Lago, al fondo la Brecha de Tucarroya y el refugio.

Ya bajando al Felqueral...el sol desaparece por detrás de Monte Perdido.
Estoy muerta de cansancio, pero muy feliz por haber visto el glaciar...y con esa imagen de absoluta belleza en mis retinas, tendré suficiente para mucho tiempo.


Y ya está...que no es poco.
Por cierto...creo las fotos no han quedado muy bien de luz ¿no?
Tendré que volver a subir.
¿Alguien se anima?
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